Cuantas lecciones nos dan estos pequeños héroes. Gracias Violeta por seguir ahí. Te lo copio en mi blog con tu permiso para ayudar a difundirlo. Mil besos
Es verdad. Cuánto deberíamos aprender de los niños (y,como seres igual de inocentes, de los animales) si fuéramos capaces de cambiar la coraza prepotente y de falsa seguridad, que portamos habitualmente, por otra de verdad, llena de humildad y compasión. Yo también me alegro mucho de que tú sigas ahí. Besosmil
Cuantas lecciones nos dan estos pequeños héroes. Gracias Violeta por seguir ahí.
ResponderEliminarTe lo copio en mi blog con tu permiso para ayudar a difundirlo. Mil besos
Es verdad. Cuánto deberíamos aprender de los niños (y,como seres igual de inocentes, de los animales) si fuéramos capaces de cambiar la coraza prepotente y de falsa seguridad, que portamos habitualmente, por otra de verdad, llena de humildad y compasión.
ResponderEliminarYo también me alegro mucho de que tú sigas ahí. Besosmil