Este es el blog de un equipo de Cuidados Paliativos... trabajamos "a pie de cama", en el domicilio del paciente, en su espacio más íntimo y personal.

Todos los días hay un viaje distinto, duro, sorprendente, triste, emocionante... y con un final.

¿Nos acompañas?.



sábado, 25 de abril de 2009





Carlos G. H. es un paciente de 78 años que acude a nuestra consulta por que desde hace 3 semanas se nota un buen “trancazo” y no sabe como quitárselo. Carlos es un hombre afable, bromista, viudo desde hace 8 años. Al fallecer su mujer presentó una depresión, que le duró más de tres años, y que precisó medicación.

Gracias a su perro y a una pequeña huerta que trabaja con unos amigos, salió de ese “bache”, dice él. Ahora vive solo, aunque cerca del domicilio de la hija. Entre sus antecedentes figuran la de ser ex fumador desde hace 5 años, tuvo un colesterol alto que lo controla con la dieta, estreñimiento habitual y últimamente suele tener algunos “despistes”, ante los que la hija nos suele comentar que si no habría algo para mejorar la memoria o el riego… ante el cuadro clínico y la exploración física, su médico decide solicitarle una radiografía de tórax.
A los tres días éste recibe una llamada del radiólogo, para informarle que en la placa hay varias imágenes sugestivas de metástasis, por lo que el paciente debe ser estudiado para diagnosticar la neoplasia y planear su tratamiento. El médico llama a la hija para comunicarle el resultado, y en esa conversación se decide derivar al paciente al hospital para estudio.
A los 10 días acuden a consulta la hija de Carlos y su marido, con el informe de alta, en donde se diagnostica de neoplasia de colon con metástasis hepáticas y pulmonares, recibiendo una citación para consulta de oncología con el fin de programar quimioterapia. La hija comenta:.. “mire Doctor, le queremos avisar de que a él no le hemos dicho nada de lo que tiene, sólo que tiene una bronquitis bastante fuerte y que deberá ir a consultas y recibir un tratamiento”.
Al cabo de un mes acude Carlos y su hija a la consulta. Sigue con algo de tos, ha perdido peso y se le nota mas serio de lo habitual. Mire doctor, comenta, este tratamiento me ha dejado “baldado”, “además me han salido unas ulceras en al boca que no me dejan comer”….la hija añade “pero papa, que se te va a pasar muy pronto”…claro, añade el médico, “ya vera como se recupera”…”no sé doctor, últimamente no hago mas que pensar en mi mujer”…”no se preocupe Carlos que esto es pasajero, no empiece a darle vueltas a la cabeza que ya sabe que no es bueno”…Tras la consulta el médico respira y siente cierto desasosiego… pensando …”espero que no dure mucho”….


Conclusiones:

Dejar claro que no vamos a mentir al enfermo



Le diremos que somos partidarios de informar al paciente de aquello que quiera saber y solo de eso, en el
momento que quiera saber de la forma más delicada posible.



Estamos convencidos que tanto ellos (la familia), como nosotros, queremos lo mejor para el paciente, y lo
mejor es ser consciente de la situación, puesto que afrontándola es como el paciente se va a sentir mejor.



El paciente tiene derecho a conocer su estado, con el fin de disponer del tiempo que le queda, según su bien pensar le indique. Puede liquidar temas de testamentaria o cumplir aquellos deseos o metas que aún pueda satisfacer en el tiempo que le queda.



Vamos a estar al lado del enfermo y vamos a atender sus necesidades, para que no haya dolor y se encuentre lo más confortable posible.
AUTORES

Luis Pérez Bescos Pediatra. Miembro del comité de ética asistencial de la comarca Araba. C.S. Casco
Viejo. (Vitoria-Gasteiz)

Jesús Iturralde Iriso Médico de familia. Tutor de médicos residentes. C.S. Casco Viejo (Vitoria-Gasteiz)

Ainhoa Lecuona Irigoyen Médico residente. C.S. Casco Viejo (Vitoria-Gasteiz)

Ainhoa González de Zarate Pérez de Arrilucea Médico Residente CS Casco Viejo

COORDINADOR

Sergio Giménez Basallote Médico de Familia. Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (SEMERGEN). Centro de Salud del Limonar. Málaga
Extraído del artículo: Familiares de un paciente con neoplasia, que no quieren que se le informe del diagnóstico.
Publicado en la revista: El Médico, profesión y humanidades.
Nº 1092. 16-31 de Marzo de 2009.
Pags. 35 y ss.

1 comentario:

ESteFaNia dijo...

Gracias C.S!!
Ilustra mucho y ayuda....por lo menos a mi.
Informarles hasta donde ellos mismos quieran y necesiten..pero nunca dar vueltas y ocultar.. ¿no es así?