Hoy es su cumpleaños.
Yo se lo recordaré cuando la bese a la hora de comer. Me mirará risueña y, con cara pícara, un momento antes dudosa (un mínimo gesto la delatará), me dirá que ya lo sabía. Nos abrazaremos y sentiré su cuerpo cada vez más menudo entre mis brazos, su corazón latiendo nervioso como un pajarillo asustado que se deja envolver al tiempo que se siente protegido. Nos reiremos y cantaremos una canción de cumpleaños o cualquier otra.
Luego me ayudará a hacer la comida y a poner la mesa mientras hace mil viajes desde el comedor a la cocina y viceversa, ahora a por una cuchara, luego a por un vaso que me sobra, más tarde a por... no sé qué venía a buscar. Le daré la cuchara, luego buscaremos juntas el vaso que le falta o le sobra y nos alegraremos mucho cuando demos con él (que, por supuesto, estará en el lugar de siempre, donde toda la vida desde que yo recuerdo).
Por la tarde, antes de que me vaya y sin que yo me de cuenta, me dejará 5 euros en la antigua cómoda, disimulados junto a mi reloj y mis cosas.
Gran parte de mi energía vital se queda entre esas cuatro paredes, pero siempre estoy deseando volver.
2 comentarios:
Mis felicidades para ella y para ti, esos momentos cómplices, llenos de amor, son un tesoro para las dos.
Un abrazo (Fdo.Alondra)
Un gran tesoro Alondra!
Besosmil
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