Este es el blog de un equipo de Cuidados Paliativos... trabajamos "a pie de cama", en el domicilio del paciente, en su espacio más íntimo y personal.

Todos los días hay un viaje distinto, duro, sorprendente, triste, emocionante... y con un final.

¿Nos acompañas?.



domingo, 17 de mayo de 2015

PoR uNa MiRaDa...

Es cuando el sentir, el pensar, el hacer, el vivir no siguen un mismo camino y el sueño cambia el color de cada instante, cuando la certeza de que el caos va enroscándose a los pies día a día,… es entonces cuando deseas que algo grande te seduzca y te ayude a volar, como Wendy tras Peter Pan hacia el país de Nunca Jamás.

Si supieras las veces que aún te veo sentada en la parada del tranvía, vestida con tu chaqueta rosa, esperando para subir al hospital. Y la de veces que, sin darme cuenta, evito pasar por la acera de enfrente para no verte, para no sentirte… y, de repente, ahí me encuentro frente a ti de nuevo, sintiendo tu olor, viendo como se mueven nerviosas tus manos, como me miras despacio, sin tiempo. Cada vez que subo al tranvía y suena la voz que anuncia la próxima parada, recuerdo como te sujetaba por la cintura y dando unos pasitos de baile, a la vez que te canturreaba al oído imitando la voz, nos íbamos acercando sonriendo a la puerta de salida, con un poco de vergüenza tú sin vergüenza yo,... y otra vez un nudo denso sube desde el estómago hasta mi garganta por enésima vez.

Tras una pérdida intentas retener en el corazón y en la memoria los últimos instantes, las conversaciones, la piel, las miradas, el olor, los últimos días, meses, años… Qué no dijiste? Qué no hiciste? Qué te dejaste por vivir? Qué se te olvidó? Qué se te pasó por alto?... Porque sea real o no, el sentimiento de que podías haber hecho más y mejor, creo que casi siempre queda.

Si estuvieras aquí intentaría una vez más que las cosas fueran diferentes, me esforzaría una vez más para que fueras feliz, porque vivieras en paz, por entenderte, por... quererte más.

Por otra parte, y en un fundido….

A ti, el ser que me dio la vida como dice Alejandro Sanz,... no sabes cómo voy a extrañar tu mirada acuosa y tus manos nervudas entrelazadas con las de María, no sabes cuánto echaré de menos el ruido del andador por el pasillo, ese ruido que ahora me altera porque sé que me buscas, constantemente… esa prisa porque tu tiempo apremia, esas quejas que ya no tienen remedio por mucho que tú y yo nos empeñemos. No me imagino cómo voy a echar de menos eso y mucho más que ni siquiera sospecho.

Y tú María, en medio de la nada que va erosionando inexorablemente incluso tu sombra y se extiende como un charco bajo la lluvia, sigues cohesionando, continuas estrechando lazos como has hecho toda tu vida. “Por una mirada un mundo, por una sonrisa un cielo, por un beso… yo no sé qué te diera por un beso.” Así es.
 
Alma

 

2 comentarios:

Antonio R. dijo...

Pues yo ,desde la distancia, me siento afortunado por haber echado una mirada a lo que escribes, algo tuyo, y te quiero transmitir mi mejor sonrisa , para , por último, enviarte un gran beso.

Violeta (Pilar Lázaro) dijo...

Y yo Antonio te agradezco la mirada, tu mejor sonrisa, el beso del final...Y te mando de vuelta las ganas de conocerte, para poder hacer real todo lo anterior.