
Los
CUIDADORES son personas que:
Sufren
Respetan
Disfrutan
Perdonan
Ríen
Tienen miedo
Lloran
Sienten
Aciertan
Tienen vida propia
Se equivocan
Necesitan ayuda
Con respecto al enfermo:
Aceptan la enfermedad y hablan de ella.
Se informan y se forman sobre los cuidados adecuados.
Comparten con su familia los cuidados del paciente.
Con respecto a si mismos:
Reconocen sus límites.
Abordan los problemas de uno en uno.
Aprenden a decir NO ante demandas inapropiadas o excesivas.
Buscan soluciones razonables.
Conocen los derechos del cuidador y los ponen en práctica.
Delegan en otras personas.
Se alimentan adecuadamente, dedicando el tiempo necesario.
Hacen ejercicio físico.
Descansan lo necesario.
Expresan sus sentimientos, los positivos y los negativos.
Son tolerante consigo mismos.
Mantienen las facetas de su propia vida: amistades, aficiones,...
Evitan el aislamiento, salen de casa.
Afrontan la tristeza.
No se sienten culpables.
Se quieren a si mismos.
No caen en el desánimo.
Piden ayuda a otras personas y/o profesionales.

Cuando se acepta la responsabilidad de cuidar a otros,
se debe igualmente aceptar la responsabilidad de cuidarse a sí mismo.